Aspartamo: lo que hay que saber y cómo identificar su presencia en los alimentos

El licenciado Ignacio Porras: nutricionista y director ejecutivo de Fundación Sanar, explicó en Cadena 3 en qué consiste esta sustancia que está en la mira de la OMS.

El aspartamo, utilizado en una amplia gama de productos, desde gaseosas dietéticas hasta chicles (goma de mascar), se incluirá en julio como "posiblemente cancerígeno para los humanos" por primera vez por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), la rama de investigación del cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La noticia alcanzó fuerte impacto, sobre todo porque está presente en gran cantidad de alimentos considerados dietéticos. 

 

Al respecto, el licenciado Ignacio Porras, nutricionista y director ejecutivo de Fundación Sanar, el organismo que estuvo al frente de la ley de etiquetado frontal en Argentina (MN 7270), explicó que la sustancia se encuentra principalmente en bebidas dietéticas tipo gaseosas de consumo masivo, yogures, helados y chicles.

 

¿Cómo identificar su presencia en los alimentos?

Si bien en algunas etiquetas se nombra al aspartamo en el listado de ingredientes, Porras advirtió que en otros casos aparece combinado con otras sustancias edulcorantes y en consecuencia no aparece mencionado como "aspartamo", sino con un número E951. 

"Esto es para estar alertas si ese producto lo puede contener o no", señaló Porras en diálogo con Cadena 3. 

 

Por otra parte consideró que la OMS salió a "desdramatizar el tema" y quitarle peso porque "este producto y sustancia son de la mayoría que se ofrece como alternativas saludables". 

"Durante mucho tiempo los edulcorantes fueron la solución del consumo de los azúcares y la realidad es que la evidencia hace años muestra que  hay distintas patologías de alteración de la insulina y la glucemia en sangre", señaló.

 

Al respecto dijo que esta sustancia el cuerpo la censa como algo dulce y de alguna manera genera mayor secreción de insulina por el páncreas.

"La realidad es que estamos ante el consumo de un montón de sustancias catalogadas como inocuas. No hay estudios de exposición crónica al producto, somos conejillos de indias en el consumo de esta sustancia", lamentó.

 

"Estamos expuestos a una serie de productos comestibles que nos exponen a una serie de enfermedades", reflexionó. 

Por último remarcó que la evidencia de las consecuencias de esta sustancia están disponibles desde hace años y que ahora se dio a conocer una resolución de un estudio particular.

 

"Hay lugares donde el aspartamo no se comercializa y está prohibido", subrayó. 

Y concluyó que como consumidores "nos debemos la pregunta de qué estamos comiendo y cuánta información tenemos sobre lo que consumimos".